El recorrido de esta clásica es de 153 kilómetros y cuenta con cinco ascensiones puntuables: los altos de Eizaga, Liernia (dos veces), Mandubia y Olaberria. Se trata de un trazado exigente en el que medirán sus fuerzas los mejores equipos del campo amateur en una prueba puntuable para el ranking de la RFEC (Real Federación Española de Ciclismo).
A esta clásica, que se empezó a celebrar en los años veinte, el Club Ciclista Rías Baixas llega después de haber estado compitiendo hasta este sábado en la Vuelta a Zamora, y a partir del martes disputará la Vuelta a León.