Barbero es un ciclista de proyección que ha pasado por la estructura de la Fundación Contador. Desde entonces, ha militado en las filas del Infisport y del Escribano, otros dos conjunto punteros del campo Élite y Sub23. Entre sus resultados más destacados sobresale. el segundo puesto firmado en el Campeonato de Andalucía sub23 de contrarreloj individual (CRI). Por su buen rendimiento en la lucha contra el cronómetro, señala que “el Campeonato de España de esta especialidad será uno de mis grandes objetivos en este 2018”.

Por su parte, Álvarez regresa a la península después de haberse proclamado el pasado año campeón de Canarias sub23 defendiendo los colores del Loro Parque. Anteriormente, había pertenecido al Zalla Golde Team vasco y al Mutua Levante valenciano. El tinerfeño vuelve a abandonar las islas atraído “por la estructura y el calendario que tiene el Club Ciclista Rías Baixas. Es un equipo referente en el campo amateur”.

Acompañados por su nuevo presidente, Barbero y Álvarez visitaron las instalaciones de Lacados Digoin, uno de los principales patrocinadores de esta escuadra. Javier Díaz, máximo responsable de esta empresa especializada en acabados metálicos, ejerció de anfitrión en el Polígono de A Granxa.

Con estas dos caras nuevas, la lista de refuerzos de la escuadra del Val Miñor se amplía hasta la decena. Durante las últimas semanas ya había anunciado los fichajes de Rafael Pereira, Andrés Abal, Óscar Justo, Adrián Escobar, David Gutiérrez, Jorge González, Francesc Zurita y Cristian Cuervo. La primera cita de la temporada llegará el 25 de febrero, con la prueba inaugural de la Copa de España.