¿Cuál es el plazo máximo?
En el mes de junio de 2018 se sabrá si hay equipo. Estamos haciendo gestiones y hemos encontrado una receptividad grande, especialmente en las marcas gallegas. También a nivel español hemos encontrado una acogida favorable. Lo que pasa es que las empresas tienen que hacer su estudios, ir al gabinete de marketing y al consejo de administración porque queremos una implicación entre el equipo ciclista y la marca.
¿Qué problemas se están encontrando?
Estamos centrados en crear un ‘compliance’ -normas internas con las políticas y actuaciones obligatorias- para las distintas marcas, que evite las malas prácticas. Durante años, uno de los problemas que ha tenido el ciclismo son estas malas prácticas. Tienen que crearse unos protocolos de cumplimiento normativo en el que se chequea que se cumplen los estándares legales. De esta forma, se protege a las marcas y al equipo ciclista. Por ejemplo, hay marcas americanas que no les puedes hablar de ciclismo por la experiencia de Amstrong. Una de nuestras misiones es garantizar que los ‘compliance’ protegen al equipo y a las empresas. Las empresas preguntan por estos temas de dopaje y por los procedimientos porque es la garantía que quiere el patrocinador de invertir en un equipo limpio.
Encontraron cierta receptividad, pero ¿avanzaron algo?
Mientras no hagamos oficiales los acuerdos, no podemos dar nombres. Sí hemos pasado la fase inicial de negociación con varias de ellas, pero sin firmar un acuerdo, hasta el momento.
En 2018 hay dos equipos nuevos en España y dos que suben de categoría a Continental Profesional, ¿notan que hay más interés por el ciclismo?
Creemos que uno de los deportes con más proyección para el marketing es el ciclismo. Creo que no hay deportes que puedan garantizar más horas en televisión, redes sociales y espacio en prensa escrita. Es asombroso lo que llega a salir. El dinero que se invierte en ciclismo es muy rentable. En el proyecto que tenemos, queremos unir la marca al equipo ciclismo y también queremos implicar a instituciones públicas. Queremos cubrir un primer tramo privado y, a continuación, un tramo público con la asociación de la marca España, el Xacobeo y Galicia Calidade. Ya hemos hablado con las instituciones y quedamos en que primero tenemos que recorrer el camino del apoyo privado. Llegaría en segundo lugar, pero estaríamos en un 85% de apoyo privado y en un 15% de aportación de administraciones públicas.
A noviembre de 2017, ¿habrá un Rías Baixas profesional?
La perspectiva es que va a hacerse un equipo. O hay equipo en 2019 o el año siguiente. El trabajo que estamos haciendo no es un trabajo que se pierde, se acumula. Nos puede llevar más o menos tiempo en sacarlo adelante, pero consideramos que se va a sacar adelante.
¿Cuál su experiencia en el ciclismo?
Históricamente, fuimos abogados en la última etapa del Xacobeo y, por este motivo, conocimos de cerca la problemática que puede surgir en el ciclismo. Con esta experiencia, estamos en condiciones de hacer la propuesta legal para el Rías Baixas. No empezamos ahora. En el bufete tenemos un apartado de derecho deportivo en el que abarcamos el mundo de los fichajes de fútbol, el mundo del motociclismo o la natación. Estamos en varios campos. El deporte tiene mucha proyección y también conlleva trabajo en el aspecto legal. De hecho, nuestra compañera María José, es miembro del Comité Gallego de Disciplina Deportiva.